31 de marzo de 2013

Capítulo seis.





Él iba riéndose mientras cruzábamos por las puertas. La gente de atrás se dio la vuelta para mirarnos entrar, obviamente preguntándose qué era todo el alboroto. Me sonrojé y dejé caer mis ojos al suelo y le dejé que me condujera hacia un banco cerca del frente. Él iba diciendo «hola» y «que gusto verte» hacia la izquierda, a la derecha y el centro. Puse una sonrisa falsa y seguí detrás de él incómodamente. Cuando llegamos a la segunda fila, él me hizo un gesto para que entrara primero. Sonreí cuando me senté al lado de un tipo que se parecía a Peter, sólo que no tan guapo y un poco más joven; sus ojos eran marrones en vez de gris. Él me estaba revisando totalmente con la mirada, y ni siquiera se molestaba en ser discreto tampoco. Éste es obviamente su hermano pequeño.

¿Tú debes ser Victorio, verdad? —pregunté, sonriendo abiertamente.

El chico me regresó una sonrisa satisfecha, sus ojos centelleaban con picardía. —Sí, y tú debes ser la chica con la cual me despertaré mañana. 

Me reí bajito. —¿Wow, la arrogancia es de familia, eh?

Peter alcanzó y dio un puñetazo a su hermano en el brazo, haciéndome reír más. —Contente ahí, idiota, que es mi cita—refunfuñó él.

¡Shh, chicos que estamos en una iglesia! —siseé, riéndome tontamente otra vez. Peter rodó sus ojos mientras la señora en la fila delantera se giró. Era muy bonita y tenía los mismos ojos grises azulados que Peter.

¿Chicos podrían dejarlo por un día? —ella reprendió, sacudiendo su cabeza, obviamente tratando de sonar severa, pero la sonrisa en su rostro como que arruinaban el efecto. Su mirada se centró en mí y su sonrisa se hizo aún más grande—. ¿Oh, Peter, vas a presentarnos? —susurró ella con emoción. Me senté más derecha. Esa es su mamá y yo estoy sentada aquí riendo tontamente en una iglesia. Wow, grandiosa primera impresión, Lali.

Peter asintió con la cabeza. —Mamá, ella es Lali. Lali, mi mamá, Gimena —él nos presentó—, y ese de allá es mi papá —añadió él, señalando a un hombre que estaba parado dirigiéndose a un par de personas en frente del otro pasillo.

Estoy tan contenta de conocerte —habló entusiasmada Gimena y me tendió una mano.

Yo se la estreché incómodamente, sintiendo mi cara calentarse. —Yo también, Gimena. Me encanta su sombrero —dije, sonriendo. Se veía muy linda, en un trajecito color crema y el sombrero a juego con un pequeño tul en él, mamá seguro que habría comprado aquel sombrero también.

Gracias, cariño. —Ella sonrió felizmente, tocándolo por arriba.
El tipo que Peter había indicado como su papá, vino y se sentó, antes de girarse en su asiento para charlar con nosotros también. Estrechó la mano de Peter en un gesto muy maduro. Yo podía ver que ellos tenían una estrecha relación; sus padres lo adoraban, podía decirlo con sólo mirarlos.

Nico, esta es la novia de Peter, Lali —dijo Gimena alegremente, mirándome orgullosamente.
¿Novia? Eché un vistazo a Peter, esperando que dijera algo, pero él sólo pasó su brazo a través del respaldo del banco, donde descansaba mi espalda, haciéndome temblar un poco.

¿Sí? gusto en conocerte, Lali —me saludó su papá, con una amplia sonrisa y mirando orgullosamente a Peter.

Es un gusto también —musité, avergonzada por toda la atención.

¿Así que, cómo lo lleva Agustín? —preguntó Peter, echando un vistazo a un tipo de aspecto nervioso parado al frente. Él parecía muy mono en su esmoquin, pero retorcía sus manos, mirando la puerta.

Nico se rió entre dientes reservadamente. —Está bien. Creo que se sentirá mucho mejor cuando Mery llegue. De alguna manera se le ha metido en la cabeza la idea de que ella lo dejará plantado en el altar —contestó él, riendo.

¿Por qué piensa eso? —pregunté, frunciendo el ceño, un poco preocupada. Sería horrible si ella no aparece. Pobre tipo.

Nicolás se rió más fuerte, lo que le ganó un codazo en las costillas por parte de Gimena. —Le dije que ella lo haría. Yo andaba bromeando esta mañana, pero el pobre chico se lo ha tomado a pecho —contestó él maliciosamente. Peter y Vico comenzaron a reírse—. Todo iría bien ni no fuera porque el planificador de la boda no acabara de arrastrar a Mery lejos para arreglar un problema con su vestido. Cuando él me vio solo, creo que pensó que ella no vendría. Gimena sacudió la cabeza y los miró con desaprobación.

¡Vosotros tres sois malvados! En serio, de tal palo tal astilla, todos tenéis el mismo sentido del humor retorcido —reprendió ella—. Lali, yo me lo pensaría dos veces para tener niños con Peter. Deberías observar a su padre para ver lo que él parecerá en veinte años. —Ella hizo rodar sus ojos juguetonamente.
Me sonrojé como loca y solté una risita, mirando a Peter y esperando que él dijera algo a su madre sobre que esta era nuestra primera cita. Él no lo hizo. En cambio, él me dio una sonrisita de satisfacción y se inclinó hacia mí, besando mi mejilla que ardía—. Eres demasiado linda —susurró él en mi oído al tiempo que su mano trazaba diseños por mi hombro desnudo.

Mi piel hormigueó donde me tocó—. Y tú estás demasiado seguro de ti mismo —susurré de vuelta, haciéndolo reírse. Un poco más tarde una señora bonita en un traje se acercó para recoger a Nico y ambos se alejaron. Unos minutos más tarde, la música de órgano comenzó. La gente se levantó, girando para mirar la entrada de la novia. Peter tomó mi mano entrelazando nuestros dedos y debo confesar, que realmente me gustó. Parecía que su mano encajaba con la mía perfectamente, haciendo que mi cuerpo entero se sintiera más caliente. Miré hacia atrás para ver a su hermana y a su papá andar por el pasillo, pero rápidamente comprendí que no podría ver sobre el mar de gente, entonces giré de regreso al frente y mejor miré al novio. Él miraba la parte trasera de la iglesia, todas las señales de nerviosismo ahora se habían ido. Una sonrisa enorme, orgullosa se estiraba a través de su rostro. Sentí que mi corazón se saltaba un latido. Me encantaría que alguien me mirara así un día, sólo podía soñar con aquel nivel de lealtad que estaba claro a través de su cara en aquel momento. Él miraba su entrada como si ella fuera la única chica en el mundo, como si ella fuera la cosa más hermosa que él hubiera visto alguna vez. Era tan romántico que mis ojos hormiguearon con lágrimas, que era tonto porque yo ni siquiera conocía a la pareja. Después de la ceremonia nos dirigimos al jardín para las fotos. Estuve de pie con Peter y Vico mientras a su hermana le tomaban toda clase de fotos de familia hechas en varias posiciones, con toda clase de gente. Ellos se tomaron una foto con su hermana. Mery era realmente bonita y su vestido era hermoso. Ella tenía el mismo color de cabello que el resto de la familia, pero ojos marrones, igual que su papá y Vico. Todos ellos eran muy atractivos; las fotos saldrían realmente bien.
Peter vino y me agarró, jalándome hacia el fotógrafo. —¿Qué estamos haciendo? ¿Ya terminaste? —pregunté cuando él envolvió su brazo alrededor de mi cintura.

No, tengo que tomarme la foto con mi cita, según parece —explicó él, cogiendo mi barbilla y volviendo mi cabeza hacia el tipo—. Sonríe —susurró. ¡Ay hombre, odio que me tomen fotos! —Sonríe, Lali. Tranquilízate —instruyó él, riéndose calladamente. Respiré hondo y sonreí, escuchando el sonido de la cámara volverse loca delante de mí mientras me sonrojé y traté de no parpadear.

Ustedes ya quedaron chicos, gracias. Bien, ¿puedo tener a los tíos con los novios? —gritó el fotógrafo, haciendo señas alrededor.
Di un suspiro de alivio cuando Peter me alejó a un lado de nuevo. Mientras caminábamos noté que no había quitado su brazo de mi cintura y también noté que yo no quería que lo hiciera.

Ahí lo tienes, ¿no fue demasiado malo o sí? —bromeó, agachándose para examinar mis ojos con una sonrisa de satisfacción a través de su rostro.

Mientras tú no sonrías así —repliqué, poniendo mi mano sobre su boca. Él se rió y mordió la palma de mi mano ligeramente haciéndome reír y quitar rápidamente la mano, limpiándola en su camisa. Después de otros pocos minutos de coquetear y bromear por ahí, nos marchamos todos hacia la recepción.

Espero que traigas puestos tus zapatos de baile —canturreó Peter, sonriendo felizmente cuando íbamos en coche al hotel donde se llevaría a cabo.

¿Por qué, tienes algunos movimientos rompedores? 

Fui conocido por ello en mis tiempos. —Él me sonrió con satisfacción, haciéndome reír.


Cuando llegamos al hotel, tomó mi mano de nuevo, conduciéndome por el salón de eventos hacia la parte de atrás. Estaba maravillosamente adornado. Las mesas redondas fueron esparcidas alrededor del salón, cada una cubierta por un mantel azul y servilletas a juego. Sobre el centro de cada mesa había un arreglo floral azul y blanco. Era perfecto.

Parece que llegamos temprano —reflexionó Peter—. Vamos a revisar dónde nos sentaremos y recemos para que no sea cerca del tío Bartolomé. —Él me miró con horror fingido mientras nos dirigíamos a los asientos. Se paró cerca, detrás de mí, mientras explorábamos, buscando su nombre. Su aliento soplaba por mis hombros haciendo mi cuerpo casi temblar con excitación—. Oh caray, nos sentaremos con la tía Lucy y el tío Ronald —refunfuñó bajo su aliento.

Me di la vuelta para estar enfrente de él, sonriendo. —¿Más pervertidos?

Él sonrió abiertamente y negó con su cabeza. —No, pero si quieres oír historias de cómo era yo cuando era niño y ver fotos de bebé desnudo, entonces estamos sentados en el lugar correcto. —Él cerró los ojos y sacudió la cabeza, como si estuviera sufriendo. Me eché a reír. Esta cena va a ser formidable. Y lo fue, no me equivoqué. Cuando la música finalmente arrancó, él inmediatamente saltó de su silla y me arrastró a la pista de baile. —Maldición, eso fue vergonzoso, ¿hay alguna posibilidad de que puedas olvidar que escuchaste todas esas historias? — suplicó, jalándome cerca de él cuando la primera canción lenta comenzó.

Sonreí abiertamente y negué con mi cabeza despacio. —Oh no, no olvidaré nada de esto por un tiempo —bromeé. Él se rió desanimadamente y se encogió.

El DJ anunció el primer baile de los novios entonces jalé a Peter lejos de la pista de baile, quien pareció un tanto decepcionado. Miré a la pareja feliz bailar. Ellos se veían tan tiernos y enamorados que yo realmente sentí un poco de celos por su relación. De repente los brazos de Peter me rodearon, jalándome cerca de su pecho al tiempo que un tipo se acercaba. Estaba probablemente a la mitad de sus cuarenta. Me barrió con la mirada despacio con una sonrisa astuta en su cara. Sonreí de vuelta nerviosamente, preguntándome qué estaba pasando.

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MARATÓN:
+10 COMENTARIOS.

17 comentarios:

  1. maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas!!! me encanta la nove :) quiero capitulos más largos!!! :)

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  2. mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas mas

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  3. sube masssssssssss

    andrea

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  4. me encantaaaaaaa

    camila

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  5. mas novela por favoooooooooooooooooooorrrrrrrrrrrrrrr

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  6. hay yo quiero leer mas, sera el tio Bartolome dagh :P maaaaaaaaass

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  7. Me encanta la proteccion k tiene Peter con Lali

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  8. Y Acabo de subir nove http://amorporcasiangeless.blogspot.mx/
    Ha empezado el primer cap por si te quieres pasar (:

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  9. como corren! jajajaja hemos pasao de primera cita, a novia y despues a hablar de niños? jajajajaja ME ENCANTA! es una novela UNICA

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