19 de julio de 2013

Capítulo diez.

PROX CAP:
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Peter salió de la revista a las ocho, unas tres horas después de que Lali se hubiese ido. Esperaba que le hubiera gustado película. Y una mierda; si era sincero esperaba que la película hubiese sido horrible, que Simón la hubiera dejado tirada y que... Nada, lo que de verdad quería era haber sido él quien fuera al cine con ella. Con ese pensamiento, dobló la esquina que había justo antes de llegar a su casa y se quedó helado. Delante del portal estaban Lali y Simón abrazados. Peter cerró los ojos y se dio media vuelta: si se daban un beso no quería verlo, no se veía capaz de soportarlo. Sin pensar lo que hacía, empezó a andar en sentido contrario. Caminó sin rumbo durante más de una hora y, por más que lo intentaba, no podía quitarse de la mente la imagen de Lali y Simón abrazándose. ¿La habría besado? Él lo habría hecho, pero si Simón se había atrevido a tocarle un solo pelo de la cabeza, iba a tener problemas.

Pero ¿qué estaba diciendo? Él no tenía ningún derecho a pensar esas cosas, al fin y al cabo eso era exactamente lo que pretendía, ¿o no? Sí, sí lo era. Peter se dio cuenta entonces de que la echaba de menos, echaba de menos las charlas, los paseos. En las últimas casi dos semanas, él la había estado evitando y, al hacerlo, había eliminado la mejor parte del día. Peter se detuvo en seco en medio de la calle como si hubiera descubierto algo importante. Ya estaba. Por fin sabía lo que tenía que hacer; tenía que recuperar su amistad con Lali  quería que volviera a sonreírle y quería volver a charlar con ella hasta las tantas de la madrugada. Aprovecharía una de esas charlas para advertirle sobre Simón  y seguro que entonces todo volvería a la normalidad. Lo único que tenía que hacer era asegurarse de no tocarla de nuevo. Ya sabía lo que pasaría si lo hacía, y no quería arriesgarse a eso. Era valiente, pero no tanto; y con este último pensamiento, tomó el camino de regreso a su piso.

Lali se puso el pijama y decidió que leería un rato. No tenía sueño y a lo mejor así podía esperar a que Peter llegara y empezar a poner en práctica los consejos que Simón le había dado. Según él, Peter se pasaba la mano por el pelo siempre que ella se mordía el labio, y eso era señal de que se ponía muy nervioso. Lali se estaba preparando un té cuando sonó el teléfono. No tuvo tiempo de dejar la tetera encima de la mesa antes de que el contestador ya respondía a la llamada.

Peter, «cari», ¿estás ahí? —Era Eugenia. Lali se quedó helada. Según Peter  hacía más de tres meses que no la veía—. Supongo que no. —Soltó una risa tonta—. Te llamaba para decirte que he encontrado esa bufanda tuya que tanto te gusta detrás de mi sofá. —Hizo una pausa dramática y continuó—. Si quieres recuperarla, ya sabes donde estoy. Ciao.

Lali estaba tan furiosa que temió romper el asa de la taza que aún sujetaba entre los dedos. Intentó serenarse. Si analizaba con calma el mensaje de Eugenia, podía darse cuenta de que nada implicaba que Peter hubiera estado con ella. Esa bufanda, si en realidad existía, podía haber estado allí desde mucho antes de que ella llegara a Londres. Pero Lali estaba tan enfadada que no era capaz de pensar. Dejó la taza y se sentó en una de las sillas que había en la cocina. Ahora lo veía todo claro: Peter no quería tener nada con ella. A él sólo le interesaban las mujeres como Eugenia, mujeres que utilizaban una excusa tan patética como una bufanda perdida para llamar su atención. Y pensar que había echado de menos sus conversaciones... Era obvio que para él eso no significaba nada. El muy cretino le había mentido. Dios, y ella que se había creído todo ese rollo sobre lo de encontrar a alguien especial. Lali se dio cuenta de que ya no podía seguir en ese apartamento; una cosa era que él no quisiera ser su pareja y otra muy distinta, y mucho más dolorosa, era que él le hubiese mentido, que se hubiera burlado de ella. Por extraño que pareciera, Lali no derramó ni una sola lágrima, y sin pensar en lo tarde que era, descolgó el teléfono y llamó a Simón.

—¿Sí? —respondió éste con voz soñolienta.

—¿Decías en serio lo de ayudarme a buscar apartamento? —preguntó ella sin disculparse siquiera.

—¿Lali? Simón se despertó de golpe y encendió la luz de su habitación para asegurarse de que no estaba soñando—. ¿Estás bien? ¿Ha pasado algo?

—Claro que estoy bien. —Respiró hondo—. Y no, no ha pasado nada.

—Ya.Simón era perfectamente capaz de distinguir el dolor que se escondía en las palabras de Lali—. Vamos, cuéntamelo.

—Ha llamado Eugenia.

—¿Eugenia? —Eso era mucho peor de lo que imaginaba—. ¿Y qué quería? Hace mucho que no se ven.

—Seguro. —Lali estaba convencida de que Simón intentaba encubrir a su amigo para cumplir con la solidaridad masculina y todas esas charadas.

—Te lo juro. —Movió la almohada para estar más cómodo—. Y bien, ¿qué quería?

—Devolverle una bufanda.

Lali, piénsalo bien, casi estamos en junio. Nadie lleva bufanda en esta época; ni siquiera el estirado de Pedro.
Lali tuvo que reconocer que en eso tenía razón.

—Da igual. Esa llamada ha sido sólo un aviso —replicó Lali enigmática.

—¿Un aviso de qué? —Nunca lograría entender a las mujeres.

—De que si me quedo aquí acabaré pasándolo muy mal. —Respiró hondo de nuevo—. ¿Vas a ayudarme?

—Claro que sí. Te ayudaré, y no sólo con lo del apartamento. —Simón siempre había pensado que Peter era un hombre muy inteligente, pero empezaba a tener serias dudas al respecto.

—Gracias. —Lali comenzó a recuperar la calma, pero al ver la hora que era se sobresaltó—. Dios mío, Simón, es tardísimo.

—Ya lo sé. —Bostezó—. Deberías acostarte.

Siento haberte despertado —se disculpó Lali.

—No pasa nada. Para eso están los amigos. Buenas noches.Simón colgó antes de que ella pudiera desearle lo mismo. Lali se quedó en la cocina unos minutos más. Lavó la tetera y la taza que había ensuciado para nada y, cuando estaba a punto de apagar la luz, oyó cómo se abría la puerta del piso.

—¿Lali? —Peter entró en la cocina—. ¿Aún estás despierta?

—respondió ella escueta—. Me he preparado un té, pero me temo que no puedo ofrecerte. Acabo de tirarlo todo.

No te preocupes. —¿Eran imaginaciones suyas o Lali estaba más seria que de costumbre?—. Lo único que tengo ganas de hacer es acostarme.
Lali estuvo tentada de preguntarle si solo o con Eugenia, pero se mordió la lengua.

Me voy a mi cuarto —dijo ella antes de darle la espalda y echar a andar—. Buenas noches.
Peter le colocó una mano en el hombro y la detuvo.

No creo que puedas dormir si acabas de beberte una taza de té —comentó con una tímida sonrisa en los labios—. ¿Por qué no te quedas aquí conmigo a charlar un rato? Me gustaría hablar contigo sobre Simón.

El té lo he tirado —respondió ella apartando la mano de él—, así que no creo que tenga problemas para dormir. Y sobre Simón no tienes nada que decir. No es asunto tuyo. —Lo miró a los ojos e, imitando su sonrisa, añadió—: Y si quieres «charlar» con alguien llama a Eugenia  Ella estará encantada de hablar contigo. —Al ver que Peter la miraba atónito, continuó—: Ha llamado hace un rato, «cari».

Cuando Peter reaccionó, Lali ya se había encerrado en su habitación. Fue hacia el contestador y escuchó el mensaje de Eugenia  El calificativo que utilizó sonaba fatal. Arreglar eso iba a ser más difícil de lo que creía.
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16 comentarios:

  1. AMO a Simon =) espero que ayude a Lali a darle celos a Peter jajaja =)

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  2. es un imbecil! primero se siente en el derecho de advertirle sobre Simon, es un imbecil, Simon es su amigo y Lali np es ninguna niña chica aunque el pretenda verla solo como la herma pequeña de su mejor amigo

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  3. estoy deseando que subas mas noveeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee

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  4. por si no te has dao cuenta estoy enganchaisima jajajaja

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  5. jaja como se la lian ellos solitos jaja estoy pendiente del proximo

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  6. Cuando uno intenta dar un paso adelante el otro retrocede 10 casillas jajaja
    Maaas!!

    Laura

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  7. Me encanta quiero mass!

    @22lulii

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  8. Me gusta mucho, maaaas!!

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  9. NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! QUEE GENIIIAL ESTAA NOVEELAA POR FAVOR! ME RE ENGANCHEEE, QUIIIEROOOO LEER MAS! ME CAE BIEN SIMON JAJAJA POBREEE LALIIIIII, Y PETER QUE SEE JOOOODAAAAAAAAAAAAAAA JAJAJA

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  10. hola queria decirte que me encantan todas tus novelas y que pienso que tienes un talento unico asi que espero poder seguir disfrutanto de todas estas historia un besiito :)
    por sierto tambien queria decirte que acabo de habrir un blog y he empesado a escribir una novela no es de laliter pero yo pienso que esta bien , espero que si tienes tiempo puedas pasarte y decirme que tal te parece , te dejo el link de la pag http://crazyaddygrr.blogspot.com.es/

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  11. jajajajaja como se lían ellos solitos!! perdón por la demora en leer y contestar, pero ya me puse al día , voy mal de tiempo, pero te leo igual jaja espero el proximo

    @cf_plazani_cat

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