4 de mayo de 2013

Capítulo treinta y seis.

PRÓXIMO CAPÍTULO:
+20 FIRMAS.



HOLA!!! LO SIENTO!! Al final no pude hacer la maratón. Pensaba que el wi-fi del camping no lo apagaban en toda la noche y no fue así. Lo apagaron cerca de la una y media. Lo siento!!
¿Qué os parece hacer una maratón ahora? Ustedes deciden!! 
Acá va el capítulo :D
_________________________________________________________________________________

CAPÍTULO 36:

Mariana, toma asiento —ordenó el director Torres, señalando el asiento vacío al lado de Peter. Esbocé una sonrisa falsa y asentí, sentándome.

—¿Estoy metida en algún problema? ¿Fallé alguna tarea o algo en cálculo? —pregunté, mirando a Peter de reojo.

Sólo quiero hacerte algunas preguntas —dijo el director, sonriendo de modo tranquilizador, pero la sonrisa no le llegó a los ojos. Tragué saliva y traté de conservar mi expresión neutra mientras asentía, pretendiendo que no tenía idea del por qué me había llevado ahí en primer lugar—. Está bien, alguien vino hoy temprano y me reportó algo bastante inquietante y es mi deber investigar la denuncia. 

¿Denuncia? No comprendo —repliqué, fingiendo inocencia. Debía acatarme al plan de que estaba saliendo con el hermano de Peter y nada más. Todo saldría bien… si sólo pudiera evitar que mis manos continuaran sudando.

Sí, una acusación bastante seria con respecto al señor Lanzani y tú. — frunció los labios y se recostó en su silla, mirándome intensamente.

¿El señor Lanzani y yo? No lo entiendo —mentí, mirando a Peter como si le estuviera pidiendo una aclaración. Peter me sonrió tristemente y miró al hombre bajito con entradas al otro lado del escritorio.

Bueno, Mariana, otra estudiante afirma que vio al señor Lanzani y a ti en una situación comprometedora el jueves pasado al final de las clases. Ella afirma que os vio besándoos y tocándoos, en el aula del señor Lanzani. 

¡Pero, por favor! ¡Es viejo! —me burlé, mirándolo con desprecio. Peter se echó a reír y sacudió la cabeza.

Gracias, Mariana, eso me hace sentir muy bien —dijo, riéndose entre dientes aún. Sonreí.


Como sea —agité la mano hacia él despectivamente. Volví a mirar al director quién parecía estar evitando sonreír—. Estoy saliendo con alguien más. De hecho es el hermano del señor Lanzani, Victorio. Hemos estado saliendo por cuatro meses más o menos, bueno, rompimos por un par de semanas pero entonces le di celos al salir con Gastón Dalmau así que regresamos otra vez. Pero, ¿por qué alguien diría que estaba besando a Juan Pedro? Eso es... asqueroso —concluí.

Tengo una responsabilidad con mi escuela y mis estudiantes de investigar a conciencia cualquier reclamo o acusación que llega a mi oficina. Debo admitir que estaba un poco impactado al oír esto hoy en la mañana, no he escuchado ni siquiera los más mínimos rumores de esto antes de esta reunión así que no sabía exactamente qué sentir al respecto —dijo Mariano, asintiendo al mismo tiempo como si estuviera pensando sobre ello mientras hablaba.


¿Sentir sobre qué? No lo entiendo. ¿Estoy en alguna clase de problema por salir con el hermano de Pedro? —pregunté, siguiendo la corriente de que simplemente no entendía de qué estaba siendo acusada. El director negó con la cabeza.

No, Mariana. La denuncia es que estás manteniendo una relación ilegal con tu maestro.

Jadeé y me paré, negando con la cabeza.
¡Eso es estúpido! ¿Pedro y yo? No estoy siendo mala pero para ser honesta ni siquiera hablaría con él si no fuera por Victorio, como que tengo que hablarle por salir con su hermano. No tenemos nada en común precisamente, es decir, ¡él es un nerd matemático, por Dios santo! —vociferé, señalando a Peter. Lo escuché resoplar protestando, pero no reaccioné a ello, me disculparía después. Ya lo había llamado viejo así que imaginé que bien podría poner toda la carne en el asador y llamarlo nerd también.

Siéntate, Mariana. Como dije es mi trabajo investigar estas cosas. Esto es solamente una reunión no oficial para determinar ambos lados de la historia. Ninguno de los dos está en problemas por algo hasta el momento. No hay pruebas aparte de la afirmación de una chica, y por lo que el Sr. Lanzani ya me ha dicho sobre su hermano y tú, no parece haber un problema. Sólo no comprendo por qué una estudiante vendría e inventaría una acusación seria como ésa sin ser infundada. 

 Me senté en la silla y fruncí el ceño.
¡Pues eso es simplemente estúpido! De todos modos, ¿quién fue la que lo dijo? ¿Por qué alguien inventaría algo así? ¡Es de muy mal gusto! Quizás sólo quieren meterme in problemas o algo —sugerí, pareciendo dolida y disgustada.


No estoy en libertad de revelar a la persona que hizo la imputación  ¿Cuál es su relación con Mariana, fuera de clases? 

Está saliendo con mi hermano; la he visto algunas veces fuera del instituto, pero sólo con Victorio. No estaba al tanto de que eso fuera contra las reglas. Ella es la novia de mi hermano menor. Si estamos en casa de mis padres al mismo tiempo, o vamos a la misma fiesta entonces la veo, pero no es como si pasáramos el tiempo juntos o algo así. En realidad no salgo tanto con mi hermano —mintió, encogiéndose de hombros. El director Mariano apartó la vista de Peter y me miró.

Cuéntame cómo conociste al hermano del Sr. Lanzani, Mariana.


Bueno, fue cerca del comienzo del verano, me escabullí en un club usando una identificación falsa con algunas amigas. Conocí a Victorio ahí y nos caímos bien, y eso fue todo. Salimos por apenas un mes cuando me dejó. Estaba dolida así que comencé a ver a este chico del instituto tratando de hacer sentir celoso. Mi plan funcionó, volvimos y hemos estado juntos como debe ser de nuevo durante las últimas ocho semanas. A Pedro lo conocí en una fiesta a la que fui con Victorio un par de semanas después de que volvimos. Espera, de hecho le conocí antes de eso también, en la boda de Mery. Fue el día siguiente al que conocí a Vic en el club. En realidad esa fue nuestra primera cita; no una muy buena a la que llevar a una chica, una boda familiar, pero aun así me divertí. 
El director Torres parecía estar anotando todo lo que se había dicho, garabateando rápidamente en un bloc de notas.

¿Cuándo fue que descubriste que el Sr. Lanzani iba a ser tu maestro? —preguntó, girando el cuello sobre los hombros, probablemente tratando de aliviar algo de la tensión que tenían. Me encogí de hombros.

No hasta que lo vi en clase. En realidad no hablamos mucho antes así que no me di cuenta de que iba a estar enseñando en mi instituto. Fue un poco incómodo al principio, aunque ahora está bien —dije, sonriéndole a Peter pero sólo en un modo amistoso.

¿Hay personas que pueden corroborar tu relación con Victorio?

Claro. Eugenia Suárez lo conoce. Um… él no ha conocido a mis padres todavía porque mi papá, bueno, puede volverse un poco sobreprotector así que no quiero asustarlo alejándolo de mí o algo así. Vino al instituto a recogerme el otro día y habló con el señor Young y el señor Bentley. No recuerdo qué día fue. ¿por qué no revisa el libro de visitantes? Ahí estará anotada la fecha, ¿no? Fuimos a hablar con Pedro sobre la cena de aniversario de sus padres el sábado por la noche y luego la señorita Igarzabal entró mientras estábamos hablando y nos fuimos a los bolos —aclaré, encogiéndome de hombros.

¿La Srta. Igarzabal también fue un testigo? —inquirió, luciendo como si acaraban de quitarle diez toneladas de los hombros. Peter asintió. —Espero que los dos comprendan que debía investigar esto. Después de todo es mi deber asegurar el bienestar de todos los estudiantes dentro de mi instituto. Tendré que verificar lo que han dicho pero si las historias coinciden entonces todo lo que puedo hacer es disculparme por traerlos aquí —dijo el director Torres, pareciendo incómodo.

Entiendo, Mariano, sé cómo funciona. Sólo espero que no esté en mi registro que hemos tenido esta reunión. Una falsa acusación de esta magnitud podría tener un efecto perjudicial en mi carrera como profesor —señaló. El director Torres negó ferozmente con la cabeza.

Es sólo una reunión amistosa para averiguar ciertos detalles, nada va a aparecer en el registro de ninguno pueden estar seguros de eso. Y si se comprueba que estas acusaciones son falsas, entonces la persona que hizo la acusación será castigada como corresponde por causar problemas —dijo severamente. —Creo que eso es todo. El timbre está a punto de sonar en unos cuantos minutos. Investigaré esto rápidamente porque no quiero que nada cuelgue sobre nuestras cabezas de esta manera. Tan pronto como haya terminado de hablar con los otros maestros, les avisaré. Mientras tanto, si pudieran simplemente tratar de mantenerse separados el uno del otro en lo que esto se lleva a cabo, sé que esto será difícil dada la naturaleza de la relación, pero esperemos tenga todo esto resuelto para mañana —pidió, sonriendo casi pidiendo disculpas mientras se paraba, señalando el fin de la reunión. Peter se levantó y estrechó su mano y yo tomé mi mochila del suelo. Aceché fuera de la puerta, sin esperar a Peter.


¡He-estado-tan-preocupada-por-ti! Dime todo lo que pasó con el director Torres, ¿estás en problemas? —Euge lo dijo todo con una sola respiración.—Sabes, ahora que ya no le debes nada a Candela, deberíamos hacerle algo a ella. Como cubrir su casa con papel higiénico, o pintar su auto con pintura en aerosol —dijo, frotándose las manos juntas con un destello malicioso en los ojos.

Sólo veamos si la castigan por mentir primero. Mi móvil sonó así que lo saqué. Un nuevo mensaje, de Peter.

Lo hiciste muy bien ahí dentro. Estoy tan orgulloso de ti, preciosa. Llámame cuando llegues a casa después de lo de Pablo. Te amo. 

Gracias, tú también estuviste genial. Deberías revisar tu teléfono y borrar todo lo que te envié alguna vez, sólo para estar seguros. Te amo también, hablamos luego X. 

¿Está todo bien, La? Estás un poco callada —observó Pablo cuando llegó a nuestro lado, sonando preocupado. Sonreí.

De hecho, necesito contarte algo —mascullé una vez llegamos a su casa, deseando que el suelo se abriera y me tragara. Se giró en su asiento y me miró con curiosidad, esperando a que continuara—. Aquí no, vamos adentro, ¿sí? —señalé hacia la casa. No dijo nada, sólo se bajó, tomando nuestras mochilas del asiento trasero y caminando hacia la casa, esperándome en la puerta. Inhalé profundo y lo seguí a la casa, rezando porque estuviera haciendo lo correcto. Se puso en cuclillas frente a mí y tomó mis manos, mirándome con preocupación grabada en su rostro.


¿Sabes que he estado viendo a un tío?  Estoy en problemas. 

Jadeó, y su agarre en mis manos se apretó hasta el punto del dolor.
¿Qué demonios? ¿Estás embarazada? ¿Ese idiota te embarazó? ¡Jesús, Mariana! ¿Qué vas a hacer? Está a tu lado, ¿no? No te está abandonando para que te encargues tú sola de esto, ¿o sí? Si es así yo voy a… —Su voz se fue apagando, murmurando una serie de palabrotas entre dientes mientras se levantaba, arrastrándome con él sin soltar mis manos.—No debes preocuparte. Estarás bien. Me aseguraré de ello, te lo prometo. Todo está bien. Te cuidaré. Siempre estaré aquí para ti, no escaparé como ese idiota —declaró, jalándome dentro de un abrazo demoledor.

Sentí que mis ojos se llenaban de lágrimas por cuán dulce era; era una chica muy afortunada de tener a alguien como él en mi vida. —No estoy embarazada, Pablo. Dije que estaba en problemas. No estoy embarazada —confirmé. Pareció exhalar un suspiro de alivio mientras se dejaba caer en el sofá y cerraba los ojos. 

Bueno gracias a Dios por ello. Estaba imaginándonos casándonos y a mí cambiando pañales a las dos de la mañana mientras tenía tres trabajos sólo para mantenernos —farfulló, su rostro relajándose conforme hablaba. 

¿Qué? ¿Por qué te verías a ti mismo haciendo eso? —pregunté, riéndome tontamente de nuevo por lo loco que era él. 

Se encogió de hombros. 
No dejaría que te hicieras cargo tú sola. Nos casaríamos y me haría cargo de ti y del bebé —indicó como si no fuera para tanto.  Lo abracé con fuerza, hundiendo mis dedos en sus hombros mientras intentaba no llorar. 

Tienes que ser el chico más dulce, más adorable del mundo, Pablo Martínez —retrocedí, y me sonrió suavemente—. ¿En verdad harías eso por mí? —pregunté, mordiéndome el labio por lo considerado y desinteresado que era. Asintió. 

Claro que lo haría, eres mi mejor amiga y siempre lo serás. —Limpió mis lágrimas con el dorso de uno de sus dedos y me miró con curiosidad—. Está bien, así que si no voy a ser un padrastro, entonces cuéntame sobre ese problema en el que de verdad estás metida. 

Está bien, conocí a Peter en verano. Terminamos por un par de semanas cuando el instituto comenzó, pero luego volvimos hace dos meses. Ya sabes todo eso.  Peter es un poco mayor que yo. Tiene veintidós años en realidad y cuando nos conocimos él no se dio cuenta de la edad que yo tenía, y no se lo dije porque pensé que sabía. Y… y…Estoy completamente enamorada de él, Pablo. Él también me ama, esto no es una aventura solamente o algo así, vamos completamente en serio. Necesito que lo sepas antes de que lo diga.  Peter es, bueno, él es…Él es nuestro profesor de cálculo.

Pablo se levantó de un salto del sofá, mirándome como si estuviera loca, pero el brillo acusador, duro en sus ojos me dijo que creía lo que había dicho. Tragué saliva y esperé por su reacción. 
¿Él es qué? —gritó, sacudiendo la cabeza con incredulidad—. ¿El Sr. Lanzani? ¿Es una maldita broma? ¿Un profesor? Dime que es una broma, Mariana, por el amor de Dios, ¡esto es una locura! ¿Hablas en serio? ¿De verdad estás saliendo con el maldito profesor? 

Sí, lo amo —susurré, mirándolo con un tono de disculpa. Me miró con escepticismo. 

¿Lo quieres? ¿Cómo se puede amar a un hombre que saldría con una menor de edad? Sólo eres un maldita menor pero él es el que está a cargo de proteger y cuidar el bienestar del estudiante. ¡Se está aprovechando de ti! —Me gritó, mirándome como si yo fuera estúpida. 

Podía sentir la ira hirviendo dentro de mí, poniéndome de pie también. —¡No se está aprovechando de mí! ¿Puedes controlarte un minuto y dejar que te lo explique? —dije, alzando mis manos con exasperación. 

Se rió sin humor. —Claro, adelante, dime algo que me haga creer que este tipo no es un maldito pervertido que está abusando de su posición en el instituto para acosar a menores de edad —gruñó sarcásticamente. Mi mano se moría de ganas de abofetear su cara porque le estaba faltando el respeto a Peter, pero contuve mi ira. 

Cuando lo conocí en verano no le dije qué edad tenía. Empezamos a salir y pensó que yo era mayor. Cuando nos dimos cuenta de que era mi profesor y que yo sólo tenía diecisiete años, él lo rompió inmediatamente; me dijo exactamente lo mismo que tú me acabas de decir. No es un mal tipo, Pablo. Por favor, sólo cálmate y escúchame un minuto —le rogué. Su rostro se suavizó un poco.  

Si él no es un chico malo, entonces ¿por qué diablos está saliendo con una de sus estudiantes? Está enfermo, toda esta situación es enferma e ilegal —replicó él, cruzando sus brazos sobre su pecho defensivamente. Sentí mi barbilla temblando mientras las lágrimas comenzaron a acumularse en mis ojos. 

No puedes elegir de quién te enamoras —susurré con tristeza. 

Una lágrima resbaló por mi cara. El gruño. —No llores, sabes que odio cuando lloras —gimió, envolviendo su brazo alrededor de mí y me abrazó. Presioné mi cara en el hueco de su cuello e hice un par de respiraciones profundas, tratando de calmarme mientras él acariciaba mi espalda. 

Por favor no pienses mal de él. Es un buen tipo, él me hace muy feliz. La edad es sólo un número después de todo. En un par de años los cinco años que nos llevamos no serán nada. Sólo trata de ver esto desde mi punto de vista, ¿por favor? —Le rogué contra su cuello. 

Suspiró. —La, no me gusta nada esta situación. Si él es un gran tipo, entonces él debe esperar hasta que termines el instituto, él debería haber esperado hasta que se hiciera legal para que pudieran estar juntos. Está mal —susurró, me sujetó con fuerza cuando me fui a apartar. 

Negué con la cabeza. —Él quería esperar, yo no —le dije, hundiendo mis dedos en su espalda, deseando que entendiera—.Pablo, por favor, eres uno de mis mejores amigos y mi payasito y necesito que me entiendas. 
 
Suspiró y cerró los ojos. — Soy tu payasito..¿Va en serio contigo? —preguntó en voz baja. 

Sentí que mi cuerpo tenso se comenzó a relajar, ya que asentí con confianza. 
Sí, es en serio —confirmé. 

Él asintió, su rostro triste. —Sabes que debido a que él es un hombre viejo ya, estará gris pronto, ¿no? —Bromeó, una sonrisa tirando de la comisura de su boca. 

Me reí con alivio. La intensa situación había terminado, el Pablo cariñoso estaba de vuelta. Asentí. 
Sí, le voy a teñir el cabello —estuve de acuerdo, siguiendo el juego. Él se rió y abrió los ojos mirándome un poco exasperado —Ni siquiera has oído la peor parte de todo, esto es sólo arañar la superficie —le dije. Le conté todo. Todo el tiempo se quedó sentado allí, escuchando, mirándome fijamente. Cuando terminé, él dejó escapar un gran suspiro y se dejó caer en su silla. 

Guau, no estabas bromeando cuando dijiste que estabas en problemas. El plan parece tonto, sin embargo este tipo, Victorio, es un genio del mal, como tú dijiste. —Él estuvo de acuerdo, asintiendo. 

 —Estaba esperando que me apoyaras un poco y le dijeras al director que has oído hablar de Vic. No le tienes que decir que lo conoces ni nada, sólo que sabes que nosotros salimos y que él es el hermano de Peter. 

Mira, Lali, yo entiendo que quieras salir con este chico, es tu elección pero, ¿cómo os puedo ayudar, si tenéis una relación ilegal que yo no apruebo? —respondió, mirándome con tono de disculpa. 

Pablo, hace menos de diez minutos estabas dispuesto a casarte conmigo porque pensabas que yo estaba embarazada, pero ¿ni siquiera puedes decir una mentira para ayudarme a no meterme en problemas? —le pregunté, en voz baja. 

Sí, tienes razón, sería un hipócrita si no te ayudo. Me hubiera casado contigo, hubiera dedicado mi vida a ti y al bebé que no era mío, supongo que lo menos que puedo hacer es decir una pequeña mentira. —Estuvo de acuerdo. 

La felicidad estalló dentro de mí. Grité y me lancé sobre él, abrazándolo con fuerza. 
Gracias —chillé emocionada. Todo estaba listo ahora; si el director le preguntaba a mis dos mejores amigos, entonces ambos le dirían que sabían acerca de Vic. 

Relájate, La. No es como si yo fuera a darle al hombre viejo mi bendición. Él tiene que trabajar para que yo lo apruebe —dijo, riéndose. Sonreí y me aparté para mirarlo. Le besé la mejilla afectuosamente. 

Sabes que eres un amigo increíble, ¿verdad? —dije, sonriéndole agradecida. 

Él asintió y rodó sus ojos. —Si, lo sé. ¿Qué tal si me muestras lo agradecida que estás preparándome la cena? ¡Me muero de hambre! —bromeó, apartándome de él, asintiendo hacia la cocina. 

Siempre estás muerto de hambre, creo que tienes gusanos —me burlé, guiñándole un ojo mientras me levantaba. 

Oye, ¡yo no tengo gusanos! —exclamó con falso horror—. Son serpientes —añadió, acariciando su estómago y sonriendo. Me eché a reír y lo tomé de la mano, tirando de él hacia la cocina para elegir lo que quería comer para la cena. Realmente tenía unas personas increíbles en mi vida, era de verdad una chica con suerte. 
_________________________________________________________________________________







24 comentarios:

  1. lo ame mas novelay maratoooon siiiiii

    ResponderEliminar
  2. ya qiero saber qe pasa con ellos en la escuela

    ResponderEliminar
  3. Re mentirosos los dos haha

    ResponderEliminar
  4. Ayer me qede esperando maraton, has hoooooy porfa! Mas

    ResponderEliminar
  5. Qque lindos el payaso y lali

    ResponderEliminar
  6. si si si has una larga maraton...

    ResponderEliminar
  7. como es eso de SE ACERCA EL FINAL

    ResponderEliminar
  8. buenisima y si queremo maraton

    ResponderEliminar
  9. Me encantaaa la novela! Ojala y dure mucho mas

    ResponderEliminar
  10. Que linda su amistad

    ResponderEliminar
  11. El castigo que le daran a candela jajajaja

    ResponderEliminar
  12. Sube otroooo, me gusta mucho la historia

    ResponderEliminar
  13. mas porfaaaaaaaaaaas!!
    mas porfaaaaaaaaaaas!!
    mas porfaaaaaaaaaaas!!
    mas porfaaaaaaaaaaas!!
    mas porfaaaaaaaaaaas!!
    mas porfaaaaaaaaaaas!!
    mas porfaaaaaaaaaaas!!

    ResponderEliminar
  14. Sii!!!!! PAra mi hazla :P Aunque si no se si podre partecipar :(
    Espero mas
    Besos

    ResponderEliminar